Navantia ha entregado este jueves a la Real Marina Saudí la primera de las cinco corbetas construidas en sus astilleros de la Bahía de Cádiz, en un acto celebrado en las instalaciones la Base Naval de La Carraca, en San Fernando.
Al acto de entrega de la construcción 546, de nombre AL-JUBAIL, han asistido el comandante de la Marina saudí, Vicealmirante Fahad Bin Abdullah Al-Ghofaily; el Almirante jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), Antonio Martorell Lacave; la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez; el secretario general de Industria y Pymes, Raül Blanco y el CEO de SAMI, Walid Abukhaled; además del presidente de Navantia, Ricardo Domínguez; el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández Peñalver y el subdelegado del Gobierno en Cádiz, José Antonio Pacheco.
La corbeta AL-JUBAIL ha sido entregada a la Marina saudí tres años después del corte de su primera chapa (enero de 2019) y después de haber superado con éxito las pruebas de mar realizadas en aguas de la Bahía de Cádiz durante los últimos meses. En ellas se ha comprobado el buen funcionamiento tanto de la plataforma como de los distintos sistemas, con el objetivo de demostrar el cumplimiento de los requisitos especificados en el contrato del buque.
El acto se ha desarrollado conforme al protocolo militar. La Comisión Mixta de Inspección (formada por miembros de la Real Marina Saudí y de Navantia) ha subido a bordo de la corbeta para realizar la preceptiva revisión. A su término se ha procedido al izado de la bandera del buque, tras lo que la Marina Saudí ha transferido el mando de la corbeta al comandante de AL-JUBAIL. El presidente de Navantia ha entregado al Vicealmirante Al-Ghofaily la campana del buque como regalo institucional.
En la ceremonia, la secretaria de Estado de Comercio ha señalado que “el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, apoya la industria naval española a través de diversas herramientas como las actividades de promoción que realiza el ICEX, la agencia de promoción comercial española; y los instrumentos financieros” que gestiona.
“Además, tal y como anunció el presidente del Gobierno el lunes, España cumplirá su objetivo de destinar el 2% del PIB a la defensa, contribuyendo así a la seguridad europea y atlántica, al tiempo que se refuerza la seguridad de nuestro país”, ha añadido Xiana Méndez.
El presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, ha declarado su orgullo por «la gran tarea realizada por el astillero, la cooperación recibida de todos los contratistas y proveedores y la colaboración de los oficiales dedicados al programa tanto en San Fernando como en Arabia Saudí». Además, ha trasladado su reconocimiento a la plantilla de Navantia y de la industria colaboradora por su “tesón y esfuerzo”, que ha permitido cumplir el encargo “con los plazos establecidos pese a los múltiples desafíos”.
«No tengo ninguna duda de que este buque va a ser un referente internacional en su clase y un claro ejemplo de producto de vanguardia», ha señalado, además de recalcar el agradecimiento al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo por su apoyo al programa.
El vicealmirante Al-Ghofaily, por su parte, ha destacado que este ambicioso programa subraya las sólidas y duraderas relaciones estratégicas entre los dos países y ha elogiado el compromiso de Navantia para entregar en el plazo previsto una corbeta de última generación. La fragata AL-JUBAIL, ha señalado, es el buque de combate de superficie más avanzado tecnológicamente que se incorpora a la Real Marina Saudí.
El Secretario General de Industria y PYME ha trasladado en su discurso la importancia de potenciar la industria naval y de defensa española en un entorno global incierto, y de trabajar en alianzas sólidas con países aliados como muestra hoy la entrega de la corbeta.
El CEO de SAMI ha asegurado que “este es un momento de orgullo para la industria de defensa saudí y para SAMI, y demuestra nuestro éxito en la colaboración con los principales suministradores mundiales para servir a las fuerzas armadas de Arabia Saudí. Estamos seguros de que el buque HMS AL-JUBAIL será una incorporación clave a la capacidad de defensa del Reino”.
“En nombre de SAMI, expreso nuestro sincero agradecimiento a los sabios dirigentes del Reino por guiarnos y apoyarnos constantemente. También damos las gracias especialmente a las Reales Fuerzas Navales Saudíes por su confianza en nosotros. SAMINavantia sigue apoyando nuestros esfuerzos para construir un sector de defensa sostenible en el Reino, que incluye el desarrollo del primer sistema de combate naval saudí, HAZEM, facilitando la localización de la defensa a través de la transferencia de tecnología, y alimentando el talento nacional a través de la formación en el trabajo.»
EL PROGRAMA AVANTE 2200
La corbeta AL-JUBAIL tiene una eslora de 104 metros, una manga de 14 y es capaz de transportar a un total de 102 personas entre tripulación y pasaje. El contrato para la construcción de cinco corbetas entró en vigor en noviembre de 2018 y, desde que se procedió a la botadura de esta primera unidad (en julio de 2020), Navantia ha botado ya las cinco unidades con una cadencia de cuatro meses entre cada una de ellas, lo que supone lograr este hito en un tiempo récord de tres años.
Las corbetas están basadas en el diseño AVANTE 2200, adaptadas a los requerimientos de Arabia Saudí, ofreciendo prestaciones avanzadas, un excelente comportamiento en el mar, alta capacidad de supervivencia y capacidad de operación a temperaturas extremas.
De forma paralela, alrededor de 500 tripulantes de estas corbetas completarán el proceso de formación y capacitación en el Navantia Training Centre (NTC) en San Fernando.
Además del contrato de corbetas, Navantia acordó con SAMI (Saudi Arabian Military Industries) la creación de una joint venture en Arabia Saudí, una alianza que permite a Navantia posicionar sus sistemas integrados y soluciones tecnológicamente avanzadas en el mercado árabe y área de influencia, y está alineada con la estrategia de internacionalización de la compañía.
El contrato supone una carga de trabajo global de alrededor de siete millones de horas, 6.000 empleos durante cinco años. De estos, más de 1.100 son empleados directos, más de 1.800 empleados de industria colaboradora (participan más de un centenar de empresas) y más de 3.000 empleados indirectos generados por otros suministradores.
El programa, cuyo último buque deberá ser entregado en el año 2024, incluye además de la construcción, el Apoyo al Ciclo de Vida durante cinco años, desde la entrega del primer buque, con opción a otros cinco años adicionales.
También incluye el suministro de varios servicios, tales como apoyo logístico integrado, adiestramiento operacional y de mantenimiento, suministro de Centros de Formación y Adiestramiento para el Sistema de Combate y Sistema de Control de Plataforma de los buques, el Apoyo al Ciclo de Vida y los sistemas para el mantenimiento de los buques en la Base Naval de Jeddah.